CATEDRAL DE CHACHAPOYAS: EL TEMPLO DE LA FE MANIPULADO POR LA FALTA DE AUTORIDAD
En noviembre del 2006, se hicieron los primeros golpes, quitar las puertas, sacar la pileta y romper columnas. Gritos y protestas (no colectivas) han hecho que se reinicien los trabajos, los mismos que han sido cuestionados por las constantes modificaciones del expediente técnico y la carencia de un presupuesto real y efectivo que alcance a la totalidad de la obra. Obra que ya se prolonga y que colma la paciencia de creyentes y ateos.
LA CATEDRAL EN SU PROCESO HISTORICO
Toda ciudad conquistada y saqueada por los españoles, por tradición castellana, tendría que tener un lugar para el culto popular. En Chachapoyas, se destina un terreno para su construcción que poco a poco fue mejorando y transformado su apariencia física, hasta lo poco que recordamos de aquella construcción que colapso en el año de 1969 con el terremoto de ese año (así lo afirma el periódico La Voz de Amazonas). Esta estructura es la más recordada por las generaciones del 50 y 60, pese a que no es la más bella de todas (leer artículo en este blog: “TERCERA CATEDRAL DE CHACHAPOYAS: INFLUENCIA JUDIA O MODA RELIGIOSA”).
El año 2003, con el surgimiento del Comité Pro Reconstrucción de la Catedral en Lima, conformado por ciudadanos distinguidos de Chachapoyas y Amazonas, en base a la convicción y compromiso moral con su terruño, han desarrollado un expediente, campañas de recolección de dinero, etc, para motivar al Estado y a la comuna chachapoyana, el desarrollo de trabajos en el estructura física de la catedral, que hasta noviembre era motivo de burla, con calificativos mundanos como: “Coliseo de Gallos”, “Torta del milenio”, etc.
El Ministerio de Vivienda, por intermedio de su ex ministro Rudecindo Vega, destina un monto para iniciar la obra alrededor de S/. 380,000 Nuevos Soles y una contrapartida municipal cercana a los S/. 50,000, que resulta insuficiente para lograr reconstruir toda la infraestructura, ya que se estima un costo superior al MILLON Y MEDIO DE SOLES. En la actualidad, la colectividad camina extrañada mirando los trabajos en la principal casa de la fe chachapoyana y ven como avanzan la construcción de monstruosas vigas de fierro, acero y cemento y para nada se aproxima a lo que “soñamos todos”. Y para “suerte” de los gobernantes locales, la obra se estaría suspendiendo porque el dinero presupuestado ya se estaría agotando y sin cumplir con las metas trazadas en el plan de construcción, hecho que no permitirá cumplir el deseo del Obispo de la Diócesis de hacer una ceremonia especial conmemorando los CINCUENTA AÑOS del fallecimiento de OCTAVIO ORTIZ ARRIETA, deseo y reclamo que hizo en su homilía el 15 de agosto del 2007 en el Teatro Municipal.
GOTA A GOTA LA PACIENCIA SE AGOTA
Sin temor a equivocarme, la falta de visión y un plan integral de gobierno que caracteriza a la presente gestión municipal, le viene quedando grande el traje y la banda de autoridad. La falta de coraje y entrega de condecoraciones a personas influyentes dentro de la parroquia chachapoyana, siguen acallando las protestas de un pueblo, que ve con impotencia como las buenas voluntades se transforman en inequidades gubernamentales, que en caja del año 2007 tendría más de DOS MILLONES DE SOLES sin ejecutar.
Una de las características de los gobernantes, es la de la gestión. Y gestión se entiende como algo que se canaliza, que se proyecta, que se conversa, que se promueve. Y eso parece que está muy ajena y lejana del pensamiento en el gobierno local, donde alcalde y consejo en pleno, tienen responsabilidad social con la ciudad emblemática de Chachapoyas, que el 2038 estará cumpliendo sus 500 años de fundación.
Sin duda alguna, que esta falta de capacidad de la gestión para desarrollar proyectos y ofrecer a la comunidad nacional e internacional, tiene también un freno en la política publica gubernamental y en el gasto público, donde el dinero no pude ser invertido en obras de esta naturaleza –llámese iglesias-, sin embargo la Ley del Patrimonio Nacional de Bienes Muebles e Inmuebles faculta la intervención del estado, en defensa de la recuperación y puesta en valor del patrimonio cultural, donde lamentamos, que las anteriores gestiones no se hayan percatado y motivado en incorporar como parte de la Zona Histórica y Monumental a la Catedral de Chachapoyas.
En fin, pero pese a ello el estado ha intervenido en esta obra (como es el caso del presupuesto otorgado por el Ministerio de Vivienda), que puede ser un antecedente importante para que se exija al Gobierno Nacional para que siga invirtiendo en esta obra, además de que nuestras autoridades eclesiásticas deberían hacer lo mismo, de lo contrario, seremos testigos eternos y observaremos las obras inconclusas de este monumento a la fe, que solo la falta de principio de autoriad de esta gestión local, permite una bofetada a la tradición, cultura y prestigio de un pueblo como chachapoyas, que no merece seguir durmiendo.
TERCERA CATEDRAL DE CHACHAPOYAS: ¿INFLUENCIA JUDIA O MODA RELIGIOSA?
Una de las grandes invenciones del Siglo XX, es el nacimiento de la fotografía, que poco a poco amplio su mercado y simpatía por el mundo, ya que por fin se dejaba de lado la pintura para retratar a la familia, para imprimir una copia idéntica a la persona, sin calco ni copia. La fotografía, desde que dio a luz, se convirtió en el brazo aliado de la historia. La fotografía es una de mis pasiones, heredada naturalmente por el oficio de mi padre en Chachapoyas, superando los cincuenta años en este oficio de retratar a todo un pueblo. Revisando sus archivos fotográficos, he recordado la llegada del primer avión, del hospital en Santa Isabel, del kindergarten, de la primera escuela pública, de su palacio municipal, del reloj público, de las calles empedradas y de la Basílica Catedral de Chachapoyas, que tal como se cuenta, son seis tipos de construcciones, cada uno con su estilo y formas de acuerdo a la corriente de la moda y las épocas o talvez de las influencias socioeconómicas de la ciudad. La tercera en particular, rompe todos los esquemas, con su gigante construcción, adornada por dos cúpulas, al estilo judío, semita o musulmán. Se presume que su construcción haya sido construida en el Siglo XVIII y su duración habría sido hasta la segunda mitad del S. XIX, donde se erigió la otra catedral que se derrumbó el 28 de Mayo de 1928, a consecuencia de un terrible terremoto que destruyó gran parte de la ciudad que no superaba las 10 mil personas y, que fue razón para que gran parte de nuestra historia desapareciera entre esos escombros.
LOS JUDIOS Y ESPAÑA
Los judíos, desarrollaron su nación y ampliaron sus fronteras conquistando nuevos territorios, llegando a Sefared, entrando por cabo gallego de Finesterre (fin de la tierra). Según la historia, Galicia sería el lugar donde se asentaron y dominaron poco a poco la península ibérica. Desde los primeros 200 hasta entrados los 1200 años después de cristo, judíos y musulmanes tuvieron grandes influencias en la sociedad española. Es así que el proceso de transculturización hace que con el tiempo las raíces de los nombres y apellidos hayan cambiado en función a la geografía y nuevas tradiciones. Estudiosos de la heráldica y los árboles genealógicos en España han determinado más de 16 mil apellidos con raíces judías, siendo las más resaltantes (por su presencia en Chachapoyas todavía), los siguientes: Alvarado, Cáceres, Chávez, Correa, Dávila, Delgado, Fernández, García, Hernández, Herrera, La Torre, López, Merino, Medina, Narváez, Navarro, Pacheco, Pardo, Paredes, Pizarro, Quiroz, Ramírez, Ramos, Reina, Rivas, Saavedra, Sánchez, Torrejón entre muchos más.
Se cree que unos 60 millones de los habitantes en Latino América son descendientes de estos primeros colonos judíos. Estos latinos conocidos como "marranos" (Judíos que se convirtieron a católicos) tienen apellidos codificados para esconder su identidad y no ser muerto durante la Inquisición. Existen listas de todos los apellidos judíos en Latino América. Una de las codificaciones fue el terminar el apellido en "ez", tales como Rodríguez, Martínez, Ramírez, López, Velez, Jiménez, etc.
ALONSO DE ALVARADO EL JUDIO QUE CONQUISTO CHACHAPOYAS
En ese contexto, los españoles encabezados por Alonso de Alvarado y Miranda, nacido en Secadura en el Ayuntamiento de Cantabria y bautizado en la Iglesia de San Juan Bautista de su tierra natal, tiene -como es natural- que haber traído la expansión genética de sus opresores los judíos y en determinado momento decidieron construir este templo con estas singulares características, en una ciudad que en los siglos XVII y XVIII tuvo significativa importancia económica, social y política para los intereses de la corona española. De acuerdo a la historia, las cúpulas pertenecen a la arquitectura bizantina y tuvieron su esplendor en la llamada "Tercera Edad de Oro" , entre los siglos XIII y XV, siglos que estuvieron los españoles bajo la influencia de los judíos. Todas las cúpulas son ovaladas, en este caso, la de Chachapoyas, es de estilo barroco.
ENTRE CONSTRUCCIONES Y DESTRUCCIONES
Desde que se registra la primera iglesia con el título de Catedral en Chachapoyas, por 1606, hasta la fecha se tiene conocimiento de seis templos y todas ellas ubicadas en la Plaza Mayor. En la actualidad, por la reconstrucción de este templo, la ciudad no cuenta con un lugar amplio, cómodo y seguro para recibir diariamente a los creyentes. Los desaciertos y ambigüedades de nuestras autoridades locales, han generado conflictos sociales y enfrentamientos con la jerarquía eclesiástica, que dio “indirectamente” un plazo de cinco meses para su culminación. Tiempo insuficiente, teniendo en cuenta que lo destrozado a la fecha, supera mucho más de lo presupuestado para colocar las torres tradicionales del proyecto inicial.
Los templos religiosos, en muchos pueblos, son la carta de presentación ante el mundo. Este templo que se aspira reconstruir, deberá en un momento determinado, tomar una determinación sobre que tipo de Catedral queremos recuperar, ya que de todas las existentes en el pasado, quizá ésta en particular tenga un punto a favor, por su belleza, sobriedad y hasta un homenaje a nuestros ancestros judíos.
