Se encuentra en los fríos parajes de la ecorregión Puna, a más de 4,000 msnm, en Arequipa y Moquegua... abarca extensos pastizales, bofedales y lagunas, junto a los imponentes volcanes Misti y Ubinas.
Flamencos Andinos (Phoenicoparrus andinus)
Este lugar debe su nombre a la Laguna Salinas y a la pampa Aguada Blanca. Las frías y salobres aguas de la laguna Salinas, albergan a 70 tipos de aves como gallaretas, ojojos y avocetas andinas... en la reserva también vive el cóndor andino, el ave voladora más grande del mundo.
En la pampa están los últimos relictos de árboles de qeuña, así como vegetación de tolares y yaretas que soportan temperaturas de hasta 25º bajo cero. Daniel Giannoni
Suri (Pterocnemia pennata) En esta reserva se protegen especies en vías de extinción como el guanaco, la taruca, el vistoso flamenco andino y el suri o avestruz andino, que dejó de volar para volverse un ave terrestre y corredora.
En la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca, se encuentra el bosque de piedra de Mauka, que con el paso del tiempo se ha convertido en hogar de las últimas poblaciones de vizcachas del Perú.
La reserva nacional Salinas y Aguada Blanca es un oasis en medio de la llanura altoandina, que merece ser visitado.
a laguna Salinas es una laguna de agua salobre y está rodeada de turberas y bofedales. En esta reserva se encuentran importantes nevados y volcanes como el Misti, Chachani y Pichu Pichu, además de varias lagunas. La Reserva alberga relictos de bosques andinos, así como praderas altoandinas que poseen especies típicas que forman agrupaciones como la Yareta (Azorella sp.), Queñual (Polylepis sp.) y Kcapo (Parastrephia lepidophylla), usadas por la población local como combustible y para el pastoreo de ganado.
Creación
La Reserva Nacional Salinas y Aguada Blanca fue creada por Decreto Supremo 070-79 el 9 de agosto de 1979. El 28 de octubre de 2003 los Bofedales y Laguna de Salinas y la Laguna del Indio-Dique de los Españoles fueron designados Humedales de Importancia Internacional por la Convención Ramsar.
Objetivo
Los objetivos de la Reserva Nacional Salinas y Aguada Blanca son conservar la flora y la fauna, así como la belleza escénica y las formaciones geológicas de la zona, fomentando la utilización racional de especies altoandinas.
Proteger hábitats que ofrecen condiciones óptimas para el desarrollo de poblaciones de vicuña (Vicugna vicugna), taruca (Hippocamelus antisensis, parihuanas (Phoenicopterus ruber chilensis).
Proteger bosques de queñual (Polylepis).
Ubicación
La Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca se encuentra ubicada en las provincias de Arequipa y Caylloma, del departamento de Arequipa, y la provincia de General Sánchez Cerro, del departamento de Moquegua. Abarca una superficie de 366 936 hectáreas y se encuentra a una altitud promedio de 4 300 m.s.n.m.
Partiendo de Arequipa, se accede a la Reserva por tres vías: la carretera Arequipa - Yura - Juliaca, la antigua carretera de Cabrerías y la carretera Arequipa - Chiguata - Puno.
La Reserva se encuentra extensamente poblada. La mayor parte de su territorio pertenece a trece comunidades campesinas, y hay más de cien propiedades privadas reconocidas por la legislación vigente. Las cumbres del Misti y el Chachani son las únicas que no tienen propietarios. Políticamente, el ámbito de la Reserva pertenece a cinco distritos de tres provincias ubicadas en dos departamentos: Arequipa y Moquegua.
Clima
En la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca, las características climáticas de la puna presentan temperaturas medias anuales que oscilan entre 3 y 8 grados centígrados, con mínimas absolutas que llegan hasta los –10 ˚C. En la zona del Frayle, la temperatura anual promedio llega a 2,6 ˚C y el promedio de la mínima absoluta es de –10,1˚C. Las máximas absolutas varían entre los 13 y 15 grados centígrados.
En Imata, el promedio anual es de 5,1 ˚C, con una mínima de –9,7 ˚C y una máxima de 16,3 ˚C (Javier Pulgar Vidal, en su libro Las 8 Regiones Naturales, nos dice que la temperatura más baja registrada en el Perú es de –25 C, en julio de 1961, en Sumbay). El mes más cálido es noviembre y los meses más fríos son junio, julio y agosto (cuando puede llegar hasta –18,9 ˚C). Las fluctuaciones térmicas son amplias y se dan tanto entre el día y la noche como entre la sombra (área cubierta) y el sol (cielo abierto). Las heladas se presentan durante casi todo el año, aunque bajan en intensidad durante los meses de mayor precipitación, particularmente en marzo.
Se ha observado que las precipitaciones disminuyen de este a oeste. En el área de la Reserva, tenemos cifras que oscilan entre 200 mm (Pampa Arrieros) y 519 mm (Imata). Los meses de mayor precipitación son enero, febrero y marzo, en los cuales se registra 65 por ciento del total de precipitación anual. En los últimos veinte años, la región sur ha sufrido ciclos de sequías muy severos, lo cual nos indica que debemos manejar con sumo cuidado el agua en este frágil ecosistema. La humedad relativa media es baja: su promedio menor es de 50 por ciento. El viento helado contribuye a la sequedad ambiental y la evaporación es intensa (1,5 m por año o más).
Geología
Desde el punto de vista geológico, los materiales existentes en la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca son relativamente recientes. Esta área, así como los lugares aledaños, ha soportado eventos geológicos de diferente magnitud debido principalmente a movimientos epirogénicos y, en menor intensidad, orogénicos, los que han desarrollado estructuras plegadas (anticlinales y sinclinales), fallas y rasgos topográficos positivos.
Las principales estructuras geomorfológicas que se encuentran en la región son:
Arco volcánico del Barroso: Cadena montañosa agreste de origen volcánico, formada por aparatos volcánicos, como Chachani, Nocorane y Las Minas. La erosión glaciar parece haber modificado el relieve.
Cadena del Barroso: Continuación del arco volcánico del Barroso; serie de altas montañas con rumbo sureste-noroeste. En ella se encuentran los Cerros Quinto, Pajajasa, Pichu Pichu y otros modificados por la glaciación pleistocénica, con excepción del Misti, que es un volcán reciente. Podemos observar en algunos de ellos: circos glaciares, superficies estriadas, crestas dentadas, valles colgados, etcétera.
Puna: Zona sobre los 4 000 m.s.n.m., cuyo paisaje típico es de grandes pampas separadas por suaves colinas y montañas agrestes. Parece ser remanente de una superficie de erosión. Contiene tres zonas diferenciadas:
1) Pampas o llanuras: Son áreas de suave relieve o superficies más o menos planas entre los 4 000 y 4 200 m.s.n.m., aproximadamente. Destacan las pampas de Cañahuas, Yantarhuana, Chiligua, Pichu Pichu, Machorome y Yaracancha, las cuales se encuentran cortadas por valles y quebradas y han sido originadas por depósitos volcánicos (sedimentarios, aluviales y fluviales).
2) Zona de conos volcánicos: Se alzan sobre 700 o más metros sobre la pampa. Están afectadas por la erosión glaciar y profundamente disectadas: Tacune, Ubinas, Coila, Ajana, Mesa Pillone, Andahuaca.
3) Lomadas: Son colinas de superficie redondeada y de poca elevación, constituidas por los sedimentos compactados de la formación Maure y Capillone: Loma de Hichocollo, Cantayoc, Chuquillahuasi, cerro Morro Blanco, Herochaca. Han sido disectadas en valles pocos profundos, con fondo ancho y plano.
Topología
La cadena occidental de los Andes (Ubinas, Misti, Chachani) es la frontera natural de la Reserva. Se originó por la gran actividad volcánica que hubo durante el cuaternario y el terciario superior, a lo que se sumó la acción erosiva glacial y pluvial como fuerza exógena, que tuvo un gran impacto durante el cenozoico superior pero que se ha atenuado en el presente. Las estructuras volcánicas de la cadena andina —que corre de norte a sur— tienen sus representantes principales en el Misti (5 821 m), el Ubinas (5 440 m), el Chachani (6 075 m), el Huarancante (5 114 m) y el Pichu Pichu (5 570 m), que aunque está fuera de la Reserva, se ubica en su área de influencia.
A partir de la cordillera, se extienden al interior (de oeste a este) planicies o pampas de origen volcánico y aluvial con suelos de diferentes grados de textura, lo que determina su calidad y, por consiguiente, su porcentaje de cobertura vegetal. Estas pampas tienen una clara influencia altiplánica y están salpicadas por montañas de importancia, tales como el Sulcachuca (5 254 m), el Calcha (5 257 m) y Condori Grande (5 286 m), y presentan depresiones o revenideros de agua de ablación glacial que se acumula, formando pequeñas vegas o turberas de altura denominadas bofedales.
Flora
La Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca es la muestra representativa de la puna seca de América del Sur. La alta diversidad de ecosistemas y especies de la Reserva se encuentra presente en seis zonas de vida. Una gran parte de las especies de flora y fauna silvestre están amenazadas como consecuencia de la cacería furtiva, extracción indiscriminada de recursos naturales, sobrepastoreo, modificación y destrucción del hábitat, o por su alto grado de rareza o endemismo.
Hasta la fecha, en la Reserva se ha identificado un total de 358 especies de plantas, distribuidas en 155 géneros, 47 familias, 31 órdenes, cuatro clases y tres divisiones. Las familias con mayor diversidad de géneros y especies son Asteraceae, con 28 géneros y 78 especies, y Poaceae, con once géneros y 52 especies. Los géneros con mayor número de especies son Calamagrostis (quince especies), Senecio (doce especies) y Werneria (diez especies). Entre los principales tipos de vegetación, tenemos la queñoa, la yareta y la tola, entre otras.
Extracción forestal
La explotación de la tola o kcapo —y, en menor medida, de la yareta— constituye una actividad económica muy importante para algunas comunidades de la Reserva. Estas especies se usan como combustible y tienen una gran demanda en el mercado de Arequipa. El uso indiscriminado de la tola ha traído como consecuencia que amplias zonas se encuentren desprovistas de cobertura vegetal, lo que genera procesos erosivos intensos. Por otra parte, resulta frecuente la extracción de madera de queñua para la fabricación de carbón. Esta actividad está destruyendo los escasos relictos de queñuales que subsisten en algunas áreas de la Reserva y su zona de amortiguamiento.
Fauna
La Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca es un celoso guardián de la biodiversidad de la Puna Seca de América del Sur, adaptada a los bruscos cambios de clima y las temperaturas extremadamente frías que caracterizan a este ecosistema.
Hasta la fecha se han registrado un total de 176 especies de vertebrados, que incluyen 24 especies de mamíferos, 143 de aves, cuatro de anfibios, cuatro de reptiles y tres de peces.
Mamiferos
Posee una fauna típica de la puna seca de América del Sur, adaptada a los bruscos cambios de clima y a las temperaturas extremadamente frías que caracterizan a este ecosistema, aun así su diversidad es importante, posee 24 especies de mamíferos, destacando entre ellos la vicuña, el guanaco y la taruca. Además de la presencia importante de la alpaca y llama como animales domésticos.
Alpaca
(Lama Pacos) Según algunos investigadores, la alpaca proviene de la domesticación de la vicuña. Habita en la zona altoandina de Perú y en Bolivia, Chile y Argentina.
La alpaca es un animal altivo, de caminar armonioso. Su cuerpo esbelto está cubierto por fibra que, en su conjunto, se denomina vellón. En sus patas tiene almohadillas, característica que evita la erosión y dañar el pasto.
Guanaco
(Lama Guanicoe) El guanaco es el más grande de los camélidos silvestres.
Su rasgo principal es el hocico alargado y negro que lo caracteriza. El dorso del guanaco está cubierto por un vellón de color café, formado por dos capas entremezcladas de fibra corta y fina y cerda gruesa.
La Taruca
La taruca o venado andino (Hippocamelus antisensis) es una especie en peligro de extinción que habita en los Andes centrales, sobre los 3900 m.s.n.m.
La taruca tiene el pelaje muy duro. Sus astas son sencillas, con una base corta y dividida en dos ramificaciones. La llamativa cornamenta bifurcada y una notable mancha negra en forma de ‘Y’ en la cara nos permiten diferenciar a los machos de las hembras.
La Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca es uno de los pocos lugares en los que podemos encontrar una reducida población de tarucas y en donde se realizan todas las acciones para evitar su extinción.
Vicuña
(Vicugna Vicugna)La vicuña habita en el ecosistema altoandino de la puna, entre los 4 000 y los 5 200 m.s.n.m. Encontramos vicuñas en el Perú, Chile, Argentina, Bolivia y Ecuador.
La vicuña está perfectamente adaptada a la puna; tiene una fibra de color canela que además de ayudarla a mimetizarse con su medio ambiente, es finísima y abrigadora, lo que le permite resistir bajas temperaturas.
La vicuña tiene el privilegio de poseer la fibra de origen animal más fina del mundo.
Uno de los principales enemigos de la vicuña es el hombre, quien la ha puesto en peligro de extinción por la caza ilegal para vender su fibra, muy cotizada en el mercado internacional.
Aves
Son 44 las especies de aves acuáticas que habitan en sus principales humedales.
En la laguna de Salinas, encontramos una de las principales áreas para la conservación de tres especies de flamencos, con poblaciones que pueden alcanzar hasta 25 mil individuos en la temporada húmeda. En esta laguna son particularmente notables las gaviotas andinas y anátidos de diversas especies.
Parihuana Andina
(Phoenicoparrus andinus) Sus nombres comunes son parina grande, flamenco andino, parihuana andina y jututu.
Su plumaje es débilmente rosado, con una zona violácea en la parte superior del pecho. Tiene las patas amarillas y los ojos rojos. Su pico es negro, con el tercio basal amarillento.
A la parihuana andina se le considera la inspiración de don José de San Martín para la creación de nuestra bandera nacional, por sus colores rojo y blanco.
Parihuana de James
(Phoenicoparrus jamesi) Sus nombres comunes son parina chica, parihuana, flamenco de James y chururu.
De las tres especies de flamencos existentes en la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca (flamenco de James, flamenco común y flamenco andino), el flamenco de James es el más pequeño. Se le distingue por sus estrías rosadas en la base del cuello y del dorso posterior. Sus patas son rojas y sus ojos, así como el borde ocular, de color rojo pardo. Su pico es amarillo, con punta negra.
Turismo
La Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca tiene un gran potencial para el turismo de naturaleza: por ella transitan más de 50 mil turistas al año, de paso hacia el valle del Colca.
Tiene un gran potencial debido a sus paisajes, sus grandes y bellos volcanes, sus extensas planicies, sus caprichosas formaciones rocosas, su flora y su fauna adaptadas a grandes alturas, sus importantes humedales (lagunas y bofedales) y sus restos arqueológicos prehistóricos.
También ofrece posibilidades para practicar deportes de aventura compatibles con la protección de la Reserva, como la pesca de trucha en época autorizada y el andinismo en los espectaculares volcanes, así como el ciclismo y las caminatas.
Centro de Visitantes
También conocido como Centro de Interpretación de la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca, ha sido construido para recibir visitantes nacionales y extranjeros.
Aquí se muestran, a través de fotos, maquetas y paneles móviles, los paisajes representativos de la puna seca —que es el ambiente de la Reserva—, los animales y plantas silvestres que viven en el área y las actividades culturales que realizan las comunidades campesinas y lo que hicieron sus ancestros como parte de su historia.
Laguna del Indio
La Laguna de El Indio o Jayuchaca, según la voz quechua que lo nombra, es el hábitat principalmente de las Ajoyas (Fulica gigantea) y gallareta andina (Fulica ardesiaca) y de aves como la parihuana de James, la avoceta y la huallata.
Esta Laguna es una combinación de un paisaje natural y uno artificial que alberga la mayor diversidad de aves acuáticas en la Reserva, algunas de ellas amenazadas, por lo cual el Perú la ha designado como un sitio de importancia internacional, suscribiéndola en la Convención Ramsar o Convención de los Humedales.
Laguna Salinas
La laguna de Salinas ofrece al visitante la experiencia de conocer los bofedales andinos de puna seca, además de entrar en contacto directo con la naturaleza y ser testigo de las actividades que realizan las aves, que tienen en la laguna su principal proveedor de alimentos.
Sumbay
Ofrece al visitante la posibilidad de observar de cerca las pinturas que dejaron nuestros antepasados, y su incansable tarea de domesticación de la llama y alpaca.
Puruña
Un impresionante paisaje de rocas que toman la forma de un bosque en el que pueden observarse diferentes figuras y donde la naturaleza hizo todo el trabajo.
Imata
Es como un inmenso oasis petrificado en medio de una desolada y fría puna. En este lugar, la infatigable naturaleza ha esculpido figuras de hombres, animales y muchas otras variadas y caprichosas formas.
El Chaccu
El chaccu es un ritual que se practica desde tiempos del incanato. En él participaban miles de personas bajo la atenta mirada del Inca, quien dirigía personalmente la ceremonia. Luego de una ofrenda al dios Sol, se daba la orden de iniciar la captura de vicuñas, para lo cual se formaba un inmenso cerco humano que iba en dirección a las trampas hacia donde los camélidos eran arreados. Una vez capturados, se sacrificaba a los más viejos y la finísima fibra se obtenía luego de una esquila colectiva de vicuñas.
Actualmente el chaccu se realiza de manera parecida: se captura a las vicuñas mediante el arreo masivo y se las fuerza a ingresar a unas mangas trampa diseñadas en forma de embudo. En el año 2003 se esquiló a 444 animales pertenecientes a nueve comunidades campesinas y se extrajeron 91 kilogramos de fibra.
Arqueología
Durante la época precerámica —o período lítico—, la zona que hoy ocupa la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca estuvo poblada por grupos de cazadores nómadas desde unos ocho mil años antes de nuestra era. Entre las principales actividades del antiguo poblador de esta zona figuran la caza de camélidos —principalmente de vicuñas y guanacos— y la recolección de huevos, semillas y anfibios. La evidencia de sus actividades está reflejada en las diferentes representaciones rupestres de las cuevas de Mollepunco, en La Pulpera (Callalli), Sumbay y Tarucani —muy emparentadas con las pinturas de Toquepala y Mazo Cruz— así como con los petroglifos de Toro Muerto (Corire). Con el tiempo, estos grupos se fueron estableciendo en la zona, originando las primeras formas de domesticación de los camélidos silvestres.
Posteriormente se formó el reino Collagua, cuyo apogeo se sitúa entre los años 800 a.C. y 1 200 d.C. Este reino tuvo como centros principales a Cabana (Cabanaconde), Yanque, Lari y Sumbay, y se extendió desde Lampa (Puno) por todo el departamento de Arequipa. El reino vecino y contemporáneo fue el Lupaca, que abarcó todo el altiplano, incluyendo Moquegua, Tacna y Arica. Mientras que los lupacas son antecesores de los aymaras, los collaguas precedieron a los quechuas. La cerámica collagua consta de motivos geométricos simples, con colores blanco y negro sobre rojo. Su conquista fue muy difícil para los incas, pero al fin fueron absorbidos alrededor del 1 300 d.C. Con esta influencia, la actividad pastoril se incrementó, y se logró la domesticación definitiva de la llama y la alpaca.
Por eso, en la Reserva Nacional de Salinas y Aguada Blanca no sólo se preservan y cuidan los recursos hídricos de Arequipa, así como su diversidad biogenética en flora y fauna, sino también mucha de la historia que construyeron nuestros antepasados.
Actividades en el Atractivo
Andinismo, Caminata, Ciclismo de montaña, Camping, Escalada en roca, Festividades y ferias, Agroturismo
Servicios
Oficina de información, Centro de interpretación, Alquiler de acémilas, Radio, Servicios higiénicos, Estacionamiento, Teléfono
Acceso
Medio de Acceso:
Automóvil Particular - Bus Público
80 km desde la ciudad de Arequipa hacia Yura – carretera a Juliaca 1 hora 30 min
Automóvil Particular - Bus Público
60 km de Cabrerias hasta el control de Cañahuas 1 hora 30 min
Automóvil Particular - Bus Público
80 km desde Arequipa - Chihuata - San Juan Tarucani (camino a Puno)3 horas
Amenazas
Amenazas Incluyen el abuso de pastos por la ganadería y la extracción de tola, las prácticas de quema y siega, la caza ilegal de camélidos salvajes (Vicuña y Guanaco), la excesiva extracción de vegetación, y los impactos ambientales adversos asociados a la generación de energía, la construcción de carreteras y las actividades mineras en las proximidades de la Reserva.