miércoles, 22 de febrero de 2012

LAS HUACAS

Una huaca del quechua wak'a, es el lugar de los Andes Centrales del Perú el lugar de donde según la mitología inca salió la primera pareja formadora de cada comunidad andina (ayllu) después del diluvio universal, de acuerdo al mandato de Apu Kon Ticci Viracocha, El Hacedor, que les determinó un tiempo y lugar donde deberían resurgir a fin de que se volviera a repoblar la tierra y fueran los padres de las diferentes naciones o comunidades andinas (Manco Cápac y Mama Ocllo fueron una de estas parejas). Es este lugar de origen (que podía ser una cueva, un árbol, el sitio donde cayó un rayo, un cerro, una mina, un lago, etc.) donde los ayllus más prósperos solían construir los respectivos adoratorios de adobe (Costa), piedra (Sierra) o sobre una isla (Lago), lugares que por extensión también fueron conocidos como huacas por los españoles.
También por mandato de Viracocha, estas primeras parejas fundadoras del ayllu retornaban al estado en que salieron a su muerte y se volvían las deidades protectoras (Apus) de la comunidad a los que se veneraban.
Son el origen al culto de las momias y sus procesiones, el pago a la tierra o Pachamama y la veneración de los ancestros andinos al nivel de deidades menores.
Los soldados imperiales incas marchaban a la guerra formados por escuadrones de acuerdo a su comunidad de origen y por lo tanto (como los romanos) tótems que representaban a su respectiva huaca (el rayo, el cóndor, el cerro, el arco iris (*) etc.), por ello una de las maneras más terribles para castigar a los pueblos muy rebeldes era justamente la destrucción de sus huacas y momias, con lo que se rompían los vínculos que mantenían unida a esa comunidad; por la misma razón, cuando se conquistaba un reino de respeto en el que se reconocía de la misma cultura y cosmovisión andina el rey vencido (o un rey aliado de buena fe) era reconocido y llevado con todos los honores a la ciudad del Cuzco, donde a su muerte su momia pasaba a integrar y vivir espiritualmente como un todo con el Ombligo del Mundo, de ahí el estatus de sagrada de la ciudad imperial como mayor centro religioso andino, por que de esta manera la sagrada Huaca Viviente (el sinchi, curaca o Capac —jefe, señor feudal o rey—), descendiente de la primera huaca, solo fijaba un nuevo punto de adoración. Tal es el caso del Chimu Capac ó Rey Chimu (descendiente del Señor de Sipan) y de los reyes Lupaca y Zapana de los dos Reinos Collas (aymaras) del Altiplano, derrotado uno, aliado el otro.
Razón que explica la unión de raza, historia, credo, origen y cultura entre el Perú y Bolivia (antes, en gran parte un todo cultural, separados artificialmente por Bolívar) que tiene inequívocas manifestaciones en el quechuismo de La Paz (Bolivia) y en las manifestaciones aymaras de Puno (Perú).
La costumbre del culto a la huaca tutelar y los ancestros ha sobrevivido hasta nuestros días orientada culturalmente por la Iglesia Católica:
- En vez de las procesiones de las momias de los antepasados, el andino moderno saca en procesión las imágenes de los santos, como en el Corpus Christi del Cuzco, donde salen en ricas andas los santos católicos tutelares de la ciudad imperial, una reminiscencia de la procesión de las momias de los emperadores Incas en el equinoccio de junio (Inti Raymi).
- El culto de las huacas y momias ancestrales también tiene su manifestación en el Perú moderno en la fecha de Todos los Santos (2 de noviembre) o de las Ánimas del Purgatorio, donde las familias suelen visitar a sus familiares difuntos llevándoles pedidos, comida, bandas de música, velas haciendo participar a los difuntos en una fiesta en su honor al pie de sus nichos. Por esa fecha todos los cementerios peruanos tienen actividad inusual de alegre fiesta que se prolonga toda la noche y todo el día siguiente.
Otra manifestación de respeto por el Apu tutelar (espíritu sabio protector) (varón) es el pago a la tierra o Pachamama (mujer), ceremonia donde se entierra en el lugar de la huaca reconocida las ofrendas de coca, aguardiente y otras manifestaciones a fin de que el espíritu del ancestro convenza a la tierra para que ambos se muestren paternalmente fértiles con su familia, ya que ellos son sus descendientes y los veneran como tales.
El reciente descubrimiento y datación de la ciudadela de Karal (5000 a.C.) nos muestra las primeras huacas conocidas, es relevante que esta ciudadela esté en el mismo ámbito geográfico que las ruinas de Kotosh (ríos Huaura é Higueras) y en la misma zona hidrográfica de Lauricocha-Perú, donde se encuentran los primeros petroglifos y manifestación religiosa en América (Kotosh)
Por influencia cultural, estas costumbres se han expandido a pueblos no quechuas o aymaras en las regiones de Chile, Argentina y Ecuador.
Las comunidades (ayllus) unidos por sus vínculos ancestrales (huacas) existen en la actualidad a los largo de toda la costa, sierra y selva de Perú-Bolivia son una forma de gobierno y vida organizada vigente, sus tierras están protegidas por las Constituciones de ambos países. No son "minorías nativas", sino que de hecho constituyen la mayoría de las poblaciones y las que a la postre definen los resultados electorales. No son tampoco asimilables a la realidad de ninguna "minoría étnica" ni "tribu" de otras partes del mundo, con las que equivocadamente se las pretende comparar en el hemisferio occidental por foráneos. Este sustrato de civilización fue afectado por:
1- La Guerra de Chile contra Perú y Bolivia de 1879, con su secuela de la destrucción de la infraestructura productiva del Perú y Bolivia llevando la guerra a los Andes donde los Ayllus se levantaron (como en el combate de Concepción) por la destrucción y saqueo de los medios productivos ligados a la tierra.
2- La Reforma Agraria de 1970 de Velasco Alvarado, que destruyó a su nueva clase dirigente de los "príncipes-hacendados" (algunos de estos descendientes directos de nobles curacas)
Para estas comunidades solo deben esperar el regreso del orden siendo buenos cristianos, manteniendo el respeto por las costumbres y tradiciones de sus ancestros Apus (espiritus sabios) que los vigilan y protegen desde sus lugares tutelares (Huacas), y piensan que al fin y al cabo para una cultura de 5.000 años (que asimilo el aporte Hispano) 200 años es un periodo de tiempo corto.
(*) Muchos erróneamente creen que el Imperio Inca tuvo bandera y la quieren representar como una con los colores del arco iris, no es cierto, sin entender la cosmovisión andina estas versiones toman un arco iris que se empleaba en uno de los tótems (unida a una pieza cuadrada de madera) como "bandera" cuando solo representa a la Huaca de una sola comunidad y no a todo el Tawantisuyu("Los cuatro cuartos del universo").
Los datos anteriores estan tomados de la enciclopedia wikipedia.

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